24 abril, 2006

Lenguaje Expresivo

Se cuenta que Borges afirmó «ser es ser fotografiado». Lo que no se fotografía, no existe. Desde sus inicios, la fotografía —que nos permite, además de consumidores, ser productores de imágenes— se definió como una forma expresiva que trascendía el mero testimonio de la realidad para convertirse en realización artística: el fotógrafo no sólo participaba como el simple operador de una máquina, sino que atraía sobre la primitiva placa su concepción del arte y su personalidad; su propia mirada, en definitiva.
La búsqueda de un lenguaje expresivo personal, con indudables influencias de la pintura y la literatura, lleva a ambos fotógrafos a representar escenas en que el ser humano cobra protagonismo, bien por sí mismo (la figura en solitario o en grupo, con rasgos de estudio psicológico o de registro etnográfico), bien por los escenarios en que se desarrolla su existencia.